Concurso. 2011.
Se realiza este concurso para la Comunidad Autónoma de Cantabria como extensión de nuestros conocimientos en Centros de Salud. Adaptando nuestros conocimientos a un paisaje tan característico como es el Cántabro.
El Centro de Salud constituye uno de los primeros eslabones de la cadena de asistencia sanitaria, donde se desarrollan actividades encaminadas a la promoción, prevención, curación y rehabilitación de la salud de la población asignada. Por tratarse de un edificio de carácter público de tipo asistencial, se ha procurado su integración en la trama urbana teniendo en cuenta las características culturales de la población de Cabezón de la Sal y su entorno. Se ha buscado un diseño facilite una lectura de su carácter institucional y de edificio de servicio público, realizando una volumetría rotunda y clara, con una implantación adaptada al terreno y una resolución sencilla y funcional de sus accesos y su distribución interior.
Por estar el Centro de Salud sometido a una considerable actividad y que los recursos de los que dispone para su construcción y, sobre todo, para su mantenimiento son limitados se ha optado por materiales con un suministro y un mantenimiento muy accesibles, económicos que no baratos, adecuados, sin renunciar a la estética y al diseño. Por lo cual se ha proyectado una solución sencilla, práctica y duradera.
Por lo enunciado anteriormente, se han considerado los siguientes criterios principales en el diseño y construcción de este edificio:
1. Diseñar el Centro de Salud teniendo como referencia al usuario, dando respuesta a sus necesidades y favoreciendo su accesibilidad, integración y relación con los profesionales
2. Buscar la máxima integración del edificio en la trama urbana, teniendo en cuenta a su vez las características sociales, culturales y medioambientales del entorno.
3. Utilizar criterios estéticos y de diseño que pongan en evidencia el carácter singular de la edificación.
4. Diseñar el edificio altamente eficiente a través de:
– Adecuación al Programa de Necesidades.
– Flexibilidad de diseño siendo capaz de soportar futuras remodelaciones y ampliaciones creando una estructura que posibilita la unión o subdivisión de espacios según las necesidades del usuario a través del tiempo.
– Durabilidad, fácil mantenimiento y economía mediante la utilización de materiales duraderos como el hormigón tanto para su estructura como para su revestimiento.
– Máximo aprovechamiento de los recursos energéticos haciendo hincapié en el aprovechamiento del asoleamiento de todas las estancias.
– Respeto al medioambiente respetando la topografía existente, así como la no ocupación del límite de avenida de 500 años indicados en los estudios facilitados, así como la realización de una parquización mínima creando una pradera entre el río y el edificio y consolidando el monte de ribera.




